Base jabón de glicerina

La glicerina es un producto de origen natural, neutro y de sabor dulce, que está presente en la elaboración de jabones y en todo tipo de productos cosméticos. Es totalmente transparente y contiene propiedades higroscópicas que permiten absorber de forma muy eficaz la humedad presente en el aire.

El jabón de glicerina es, sin duda, la mejor opción para cuidar tu piel, especialmente si sufres de piel seca o sensible. Contiene un pH neutro de 7-8, por lo que resulta ideal para cualquier persona, incluidos los bebés. Eso sí, debes tener en cuenta que tiene un punto de ebullición muy alto, por lo que si vas a trabajar con ella, es recomendable que la disuelvas en agua o en alcohol.

Jabón de glicerina: múltiples beneficios

Si estas empezando o buscas una elaboración sencilla, a la hora de hacer jabones puedes optar por utilizar una base de jabón de glicerina. Lo único que deberás hacer es calentar dicha base al baño maría hasta que quede bien disuelta y darle forma virtiéndola en los moldes que tengas preparados. Esto te permitirá elaborar jabones libres de tensioactivos agresivos y con un pH neutro apto para todo tipo de pieles. ¡Más fácil imposible!

Entre sus muchas ventajas, el jabón de glicerina mantiene tu piel hidratada, olvidándote así de posibles picores, y/o sequedades. Además, retrasa el envejecimiento y otorga a la piel una suavidad realmente beneficiosa para aquellas personas que sufren erupciones cutáneas y piel enrojecida.

La glicerina posee además propiedades que ayudan a limpiar la suciedad de la piel y a decir adiós a la grasa que tiende a obstruir los poros, convirtiéndose en una opción muy utilizada por aquellas personas que sufren de acné y espinillas.

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