Quedan apenas dos semanas para Halloween y sabemos que muchos niños y niñas están deseosos de disfrazarse, comer muchas chucherías, pintarse la cara y pasarlo en grande.

No somos una tienda de disfraces, ni tampoco de caramelos, pero sí somos expertos en enseñarte a elaborar productos naturales y ecológicos para la piel. En este sentido, hemos creado la receta perfecta para elaborar pintura facial. ¡Tus hijos podrán transformarse en lo que quieran sin que su piel se resienta!

Piensa que el cutis es una zona muy delicada. La mayoría de los productos de pinturas faciales que se venden en el mercado contienen muchos ingredientes químicos nada beneficiosos para la piel. Con nuestra receta, tendrás la seguridad de estar utilizando ingredientes 100 % naturales y nada dañinos.

Ingredientes para 5 sticks (5 ml cada uno)

7,5 g Aceite de Coco virgen BIO
7,5 g Manteca de Karité BIO
7,5 g Manteca de Kokum
7,5 g Aceite de Ricino virgen BIO
6 g Cera blanca de abejas (cera alba)
2 gotas de Vitamina E Tocoferol

Blanco: 2 cucharaditas de té de dioxido de titanio
Negro: 2 cucharaditas de té de pigmento mineral en polvo negro
Rojo: 1,5 cucharaditas de té de pigmento mineral en polvo rojo
Amarillo: 1,5 cucharaditas de té de pigmento mineral en polvo amarillo
Marrón: 1,5 cucharaditas de té de pigmento mineral en polvo marrón

Elaboración

• Limpia y desinfecta todos y cada uno de los materiales y utensilios que vayas a utilizar. Puede que no te lo parezca, ¡pero este paso es muy importante!

• Mezcla todos los ingredientes (a excepción de la vitamina E Tocoferol), y llévalos al baño maría.

• Una vez fundidos, añade las dos gotas de la vitamina E Tocoferol.

• Divide el contenido en cinco vasos pequeños y añádeles a cada uno un pigmento diferente.

• Ten a mano los sticks labiales translúcidos y vierte rápidamente el contenido de cada vaso en ellos.

• Deja que se solidifiquen o mételos directamente en el congelador durante media hora.

Resultado final:

¿Te han entrado ganas de probarlos? ¡Seguro que a los peques de la casa les encantarán! Y no olvides que la duración es de aproximadamente un año, así que puedes conservarlos sin problema. ¡Nunca sabes cuándo pueden venirte bien!

Receta Nº96